Para muchos, viajar al pasado es un deseo persistente. Algunos anhelan visitar épocas desconocidas; otros, reencontrarse con seres queridos que ya no están. Pero la mayoría volvería atrás para enmendar el daño cometido, en especial si te persigue un pasado oscuro e inhumano.
Esta es la premisa con la que César Augusto Acevedo (Cali, 1984) trabaja en Horizonte (2025), su segunda y más reciente entrega presentada en el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF). Tras deslumbrar con La tierra y la sombra (2015), ganadora de la Cámara de Oro en Cannes, lo nuevo del director colombiano es una odisea fantasmal que explora temas como la vida, la muerte, la identidad y la memoria de un país devastado por la violencia.
La historia se desarrolla en un pueblo donde el paso de la guerra no dejó más que escombros y agujeros de bala incrustados en paredes. En medio de ese lugar inhóspito irrumpe la presencia de Basilio (Claudio Cataño), un hombre que se encuentra con su madre Inés (Paulina García), de quien permaneció separado por más tiempo del que pudieron estar juntos.
Este reencuentro solo se debe a que ambos están muertos. Al no encontrarse con su padre y marido, emprenden un viaje espiritual en el deberán revivir experiencias de un pasado desgarrador. En esta especie de limbo existencial, Basilio enfrentará a sus antiguos demonios como consecuencia de los actos que hizo en vida, los cuales lo acechan hasta la muerte. De ello será testigo su madre, quien lo acompaña en este duro pero liberador camino en busca de la reconciliación.
UN PAÍS, UN CONFLICTO
El triunfo del No en el plebiscito de los Acuerdos de Paz en 2016, que rechazó la posibilidad de dar fin a más de medio siglo de conflicto armado en Colombia, fue un hecho que dejó varias interrogantes en Acevedo. La búsqueda de respuestas fue el punto de partida para la escritura de un guión cinematográfico en 2017, escrito que con el paso de los años daría vida a su segundo largometraje.
“Esos resultados del plebiscito de cierta manera fueron una sorpresa muy grande y muy desmoralizadores en muchos sentidos y empecé a cuestionarme. También me abrió los ojos a plantearme cuál es mi criterio artístico, por qué hago películas y por qué quería hablar de esos temas”, explica el director colombiano.

De ahí que Horizonte pretende ser una experiencia lenta e inquietante; un drama psicológico que recurre a la interpelación y provoca incomodidad, aspectos que si bien pueden resultar abrumadores serán necesarios para guiar hacia la intención del director: mostrar el horror y desesperación que significa vivir en un país que se ha acostumbrado a la idea de la muerte, al punto de olvidar cuál es el verdadero sentido de la vida.
Pero aún cuando la muerte reina en el mundo de los vivos y la violencia es la única respuesta al conflicto, personajes como Basilio e Inés aportan el grado de humanidad que se daba por perdido; él, mediante su arrepentimiento, y ella, representando la nobleza y esperanza. Esto responde al ejercicio humanizador con el que trabaja la película, el cual vuelve a conectarnos con lo esencial.
La complicidad de los personajes logra transmitirse en pantalla y hace de este filme una obra íntima y conmovedora, con sólidas actuaciones estelares de García y Cataño. Ambos cuentan con un amplio reconocimiento internacional: la actriz chilena por su Oso de Plata en Gloria (2013) y el actor por sus dos Premios Platino como el coronel Aureliano Buendía en la serie Cien años de soledad (2024) de Netflix.
BELLEZA ENTRE RUINAS
Aspectos que merecen algunas líneas son el guión y la dirección de fotografía, ya que ambos posicionan a Horizonte como una obra refinada, sensible y meticulosamente pautada. Se puede distinguir la fortaleza de los diálogos entre personajes, donde no hay palabra ni frase baladí, sino piezas perfectamente posicionadas en una especie de lógica onírica y teatral.
La fotografía, a cargo de Mateo Guzmán, es una verdadera poesía visual, compuesta por hipnóticos planos generales que contrastan la inmensidad de los paisajes colombianos con diminutas figuras humanas que caminan sin un rumbo definido.

La elección de encuadres, colores y elementos visuales conversan constantemente con la atmósfera de la historia, balance que hace de este filme una experiencia contemplativa. Podría constituirse en una de las direcciones de fotografía más hermosas y destacadas de lo que va del año.
Con todo, Horizonte es una pieza sencilla pero narrativamente compleja. Más que dar respuestas sobre la condición humana, siembra interrogantes en cada uno de sus espectadores. Ese grado de ambigüedad es el mismo que puede confundir a más de alguien en su intento por descifrar el filme.
Esta obra no requiere encontrar una lógica ni una respuesta correcta, y si ese fuera su objetivo, la película perdería la mística que la rodea. Más bien, es una mirada auténtica y profunda de lo valioso que puede significar la vida, donde los espectros de la memoria recuerdan que, incluso en la muerte, es posible la redención PP.
Horizonte. Dirección y guion: César Augusto Acevedo. Reparto: Paulina García, Claudio Cataño, Carlos Mario Echeverry, Victoria Hernández. Dirección de fotografía: Mateo Guzmán. Montaje: Soledad Salfate. Casas productoras: Inercia Películas, unafilm, Don Quijote Films, Tarántula Luxemburgo, Ciné-Sud Promotion. Drama.125 min. Colombia, Francia, 2025.