BALA LOCA: “MERA COINCIDENCIA”

La serie Bala Loca (2016) destaca por ser una de las pocas representaciones de ficción televisiva sobre el periodismo y los medios chilenos, así como también por retratar la corrupción en el mundo público y privado en Chile. Su arrojo, en términos de la complejidad de las subtramas que propone, tiene costos, pero estos no logran opacar la calidad de la trama general y las interpretaciones.

Bala loca es el término que usamos en Chile para referirnos a los proyectiles que llegan donde no deberían. Disparos que, en medio de una población, alcanzan a una niña de 12 años, en vez de al narcotraficante de la banda opositora, como sucedió —entre tantas otras ocasiones— el 31 de octubre de 2024 en la comuna de Recoleta.

En la serie que comentamos aquí, es la periodista Patricia Fuenzalida (interpretada por Catalina Saavedra) quien recibe un disparo en medio de un asalto a un supermercado. Pero la sospecha se instala: tras reiteradas amenazas por sus investigaciones periodísticas, puede ser que el proyectil que asesinó a Patricia sea algo más que una bala loca.

Este es el atrapante nudo que presenta la serie de diez episodios de 2016, actualmente disponible en el streaming del Conejo Nacional de Televisión (aquí).

La muerte de Patricia es el impulso para que el protagonista de la serie, Mauro Murillo (Alejandro Goic), funde un nuevo medio digital de investigación periodística, EnGuardia.cl.

Mauro es un reconocido periodista chileno que trabajó en el diario La Época denunciando las violaciones a los derechos humanos durante la dictadura de Pinochet, pero que con el retorno a la democracia y su estilo de vida bohemio termina transformándose en ícono de la farándula televisiva.

Tras un accidente automovilístico que lo deja en silla de ruedas, Mauro se enfrenta al rechazo de los productores y ejecutivos televisivos, y vuelve a buscar sentido en el origen de su vocación profesional. En un esfuerzo no poco usual en el periodismo del mundo real Murillo, junto a un equipo de destacados periodistas, toma la posta en la investigación de Fuenzalida para terminar descubriendo una red de delitos que implican a empresarios, políticos y altos mandos de las fuerzas policiales y armadas.

La serie, que estuvo disponible en Netflix, fue transmitida entre julio y septiembre de 2016 por Chilevisión y representó una apuesta original en la industria audiovisual local, en la que el mundo de los medios de comunicación y la vida de los periodistas son rara vez retratados.

Fue también una apuesta atrevida, por llevar a la pantalla chica el imaginario asociado a los distintos casos de corrupción que se han venido conociendo durante las últimas décadas en Chile, así como también por visibilizar, desde la ficción, el hostigamiento que sufren los profesionales de la comunicación en distintas partes del mundo y que, en Chile, se ha podido ver reflejado en el espionaje a distintos periodistas y fotorreporteros por parte del ejército chileno (Faure, Lagos y Santa Cruz, 2024).

En este sentido, Bala loca es, a la vez, una parodia y un homenaje a los medios de comunicación y al periodismo. EnGuardia.cl hace referencia al medio inglés The Guardian, y también al medio digital de investigación Ciperchile, además de a una serie de diarios y revistas inventadas que, mediante el diseño gráfico, imitan a medios reales como La Cuarta, La Segunda y revista Sábado.

La serie cuenta con cameos de diversas figuras, como Sergio Campos de Radio Cooperativa, y los rostros de Chilevisión Macarena Pizarro y Francisca García-Huidobro. Murillo, por su parte, representa el clásico conflicto del periodista cuya vida es absorbida por la profesión y los vicios. Está separado, no ve hace años a su hijo y se frustra constantemente por la condescendencia con la que es tratado por estar en silla de ruedas.

Se suma a todo esto el dolor por la pérdida de su hermano detenido desaparecido, cuyo asesino sale en libertad en medio de su intento por retomar las riendas de su vida a través de este nuevo medio digital. Siempre que Murillo intenta redimirse, pareciera que la dureza del oficio y de la vida lo empujan a refugiarse en el consumo de alcohol, la cocaína y la infidelidad, poniendo constantemente a prueba sus vínculos afectivos y profesionales.

Esta decadencia se expresa audiovisualmente en la predominancia de colores opacos y de luces blancas y frías, además del carácter gris de la ciudad de Santiago como principal locación. La música instrumental varía entre acentuar el dramatismo de los conflictos con que lidian los distintos los personajes y la tensión de las escenas de acción, todo lo cual termina configurando una atmosfera desoladora propia del género policial.

En este sentido y, más allá del sugerente openning, la serie no destaca particularmente por su propuesta audiovisual. Su arrojo se concentra más bien en las interpretaciones y en la complejidad del relato.

Bala loca propone múltiples subtramas, la mayoría de las cuales funciona bien y la atan con temas contingentes tanto a nivel de las identidades –homosexualidad en adolescentes, adicciones, sexualidad en personas de movilidad reducida, etcétera– como a nivel político y social: la corrupción en instituciones públicas y privadas, los pactos de silencio y la despinochetización del ejército. A medida que se acerca el final, sin embargo, algunas de estas subtramas pierden importancia, instalando dudas sobre un guión que, en su valentía, cosecha aciertos y desaciertos.

Lo más verosímil de la serie, probablemente, es que al final nada cambia realmente. Los periodistas se transforman en héroes por un rato y el poder y sus redes siguen operando con mayor o menor visibilidad dependiendo del momento y los intereses de turno. Todo lo cual hace que la advertencia al final de cada episodio de Bala Loca –“cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia”– cobre un particular sentido. PP

Bala Loca. El fin de los intocables. Directores: Gabriel Díaz, Óscar Godoy. Productor: Marcos de Aguirre. Guionistas: Gonzalo Maza, Pablo Toro. Reparto: Alejandro Goic, Trinidad González, Ingrid Isensee, Mario Horton, Manuela Oyarzún, Fernanda Urrejola, Catalina Saavedra, Pablo Schwarz, Aline Kuppenheim, Marcial Tagle, Víctor Quezada, Alfredo Castro, Roberto Farías. Productora: Filmosonido. 10 episodios. Chile, 2016. Disponible el streaming gratuito de CNTV.

Esta columna recoge parte de las discusiones y análisis realizados por un grupo de investigadores asociados al Núcleo de Investigación en Televisión y Sociedad de la Universidad de Chile (NitsChile) y al Grupo Temático de INCOM: Estudios de Imagen, cine y televisión.

Bibliografía

Faure, A., Lagos Lira, C., & Santa Cruz, E. (2024). Ensimismado en el mercado. El periodismo chileno en la serie de ficción audiovisual “Bala Loca” (Chilevision, 2016). Media & Jornalismo, 24(44), e4409. https://doi.org/10.14195/2183-5462_44_9

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