FANTASMAS (Y SU AUSENCIA) EN ESTA PARTE DEL MUNDO: DOLOR (Y AMOR) ETERNO
El cine chileno en este último año ha mostrado varias facetas en las que sorprende. Una luz negra busca desprenderse de otras producciones nacionales con un estilo silencioso, mas no silente. Desde su construcción pausada, su montaje suave y sus escenas calmas envuelve en un aura que se distancia de muchas apuestas vistas antes por estos lados.